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La moda es el medio y el performance es la acción

  • Foto del escritor: Gabriel Moreno Reza
    Gabriel Moreno Reza
  • 19 nov 2018
  • 2 Min. de lectura

Una mujer alza su paso por una calle de Viena atestada de transeúntes. María José Arjona, artista dedicada al performance, está vestida con un body y una falda negra que le cuelga hasta el piso. Sobre su cabeza unas cintas de cuero que logran formar un casco. Su mirada altiva se confunde entre quienes caminan por la acera. El performance “Vires: Ejercicios de Poder” es una acción que se inicia a medida que el cuerpo de Arjona interviene sobre el pavimento. Sin embargo, la fuerza de esta pieza está en su vestimenta. Ahí reside un lenguaje conformado por las cintas y las telas de cuero de color negro. En esta ocasión, me pregunto: ¿Qué relación se produce entre el performance y la moda?


De manera neurálgica, respondo sí. El cuerpo es el espacio para la liberación de las voluntades de poder. Es decir, que el cuerpo es el escenario donde se libra una batalla entre las pasiones, las intensidades y las subordinaciones. Es aquí donde se inscribe toda producción artística, María José, es consciente del mensaje energético que puede generar un cuerpo en movimiento. Por eso cuestiona la noción de dominación a través de su atuendo.

En efecto, la moda es el medio y el performance es la acción, esta relación es abierta, múltiple y direccional. El cuerpo adquiere aún más fuerza cuando se viste, no, es más, que un acto de envolver entre siluetas, encajes y pliegues. En el caso de Arjona, se crea una estética de la denominación a partir de una serie de elementos que integra a su envoltorio. El body que porta es fabricado en cuero, y por encima tiene un cruce de cadenas ajustadas, representa el poder que se ejerce sobre sí mismo, pero también, se trata de una denuncia de cuan esquiva puede ser la libertad.


Por otra parte, el casco surge de la idea de protección en contra de las intermitencias del mundo, Además, de ser un objeto de lucha. “Vires: Ejercicios de Poder”, legitima la relación entre moda y performance, el vestido habla de una situación en específico, puede ser un reclamo o una afirmación. Es el medio indicado para irrumpir en el espacio, pero, el cuerpo es acción desatada. Al mover el traje esta cobra fuerza, y es lo que hace María José Arjona, cuando camina por las calles de Viena, pregonando en silencio, el asunto sobre el poder.

En fin, el espacio por donde circulamos, los lugares que habitamos y las cosas que vemos, están clasificadas dentro de ese performance que se sujeta en el tiempo. Por lo tanto, al llevar nuestro cuerpo a la acción, la ropa y los accesorios como la indumentaria que nos acompaña, se convierten en el medio adecuado para protestar.



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