Recap: Met Gala 2019
- María Choza
- 8 may 2019
- 5 Min. de lectura
Despuntando el irónico y extravagante concepto que definió Susan Sontag a continuación presentamos los looks más creativos, llamativos, extravagantes y atrevidos de esta gala inspirada en la exposición Camp Notes.
Deslumbrando con su voluminoso y llamativo vestido en tono fucsia a la entrada del Met, Lady Gaga abre la alfombra roja este año.
Nadie se esperaba otros tres looks debajo del mismo. Sorprendió a los presentes con un vestido negro con un volumen ciertamente más reducido, y en palabra de honor con escote corazón y acompañado por un paraguas del mismo color. A continuación un vestido fucsia ajustado de tirantes fino lo sustituyó, complementado con un teléfono de los años 90 y unas gafas que cubrían la mitad de su rostro. Y finalmente un conjunto de ropa interior acompañado por sus controversiales plataformas de tacón fino marcó el punto final. Brandon Maxwell fue el encargado de tal despliegue artístico.
Parecía difícil igualar la entrada de la reina del pop, pero Billy Porter hizo su llegada a la gala como si de un faraón se tratase.
Llevado en un futón negro por 6 muchachos de torso desnudo con vestimenta dorada, acabó su paseo delante de las escaleras donde uno de ellos le tendió la mano para ayudarle a incorporarse y comenzar el ascenso de las escaleras.
Con una escenografía muy ensayada le ayudó a enganchar sus muñecas en el tejido del traje y mientras iba subiendo las escaleras desplegó sus alas dejando ver un maravilloso diseño de The Blonds, brillante, repleto de lentejuelas y único en sí mismo.
Minutos después aparecía Hamish Bowles, ataviado con un traje color púrpura de diferentes tonalidades a juego con una pajarita. Acarició la alfombra roja con su colorida y grafiteada capa de Maison Margiela, finalizada en plumas púrpuras, blancas y fucsias. Capa que nos recuerda a la que portó Rihanna en el Met del 2015.
Con un atrevido diseño de Oscar de la Renta, Celine Dion apareció cuando la capa de Hamish desapareció por las numerosas escaleras. Y llegó para deslumbrar la Pasarela. Flecos tornasolados que dejaban a la vista sus esculturales piernas, unos altos y finos zapatos en punta de Chloe Gosselin del mismo color, y una corona de altas plumas robaron los flashes de las cámaras por toda la alfombra roja.
El paso de otras celebridades dio lugar a otra maravilla estética de la mano Ryan Murphy, que colmó de brillos la alfombra roja con su traje en tonos coral y una capa con la solapa en forma de concha y repleta de perlas blancas y lentejuelas en un tono más oscuro que el traje, diseñado todo ello por Christian Siriano que nos recuerda a Liberace y sus looks llenos de irreverencia.
Con un vestido rojo que casi la convertía en una heroína, Saoirse Ronan se paseó con un vestido de Gucci a través de tules pomposos y tafetanes con formas asombrosas. Los llamativos colores de las lentejuelas que portaba, terminaba en unos detalles exquisitos en los hombros que semejaban unas alas a medio abrir. Imponente en la alfombra roja y con una sonrisa más deslumbrante que su vestido.
Ya se hacía esperar Lucy Boyton, que dejó olvidados por un momento los volúmenes que habíamos ido viendo en la gran mayoría de vestidos. Los tonos pastel, las plumas, las transparencias y el brillo, fueron los protagonistas del espectacular look que Prada elaboró para ella. Además de llevar un vestido de ensueño, ensalzado por un tono de cabello acorde al vestido con unas flores decorándolo, representaba perfectamente la estética de la gala.
Pero la elección de Jared Leto hizo que olvidáramos por un momento todo lo que había ocurrido sobre aquella alfombra rosa. Optando por la excentricidad en su outfit, y con un vestido rojo ensalzado por un millar de joyas plateadas, robó el protagonismo de todos los allí presentes con la cabeza que portaba en sus manos. Copia casi exacta de su propio rostro.
Pero su aparición se apagó rápidamente cuando hizo acto de presencia Katy Perry, que iluminó la alfombra roja con uno de los looks más sugerentes de la velada, creado por Moschino. Con un vestido de miles de piedras preciosas, y rodeada de bombillas y cristales, parecía una lámpara de araña de cristal viviente. ¿Cómo se sentaría en la gala?
Como no pudo ser menos, la llegada de Gigi Hadid acaparó de nuevo toda la atención. Llega a la gala enfundada en un buzo etéreo de brillos plateados y dorados culminados en un sinfín de plumas, del maravilloso Michael Kors. No podía faltar un tocado, tapando prácticamente todo su cabello y un blazer a juego de plumas, que elevaron el look a la potencia máxima.
La cantidad de obras de arte presentes en ese momento sobre la alfombra no quitaron el protagonismo a Jannelle Monae, que la colmó de originalidad a su paso. El diseño de Christian Siriano acaparó todas las miradas. Y nunca mejor dicho. Rebosante de creatividad, el diseñador ha creado una obra de arte andante. En tonos muy contrastados ha creado un rostro a lo largo de todo el vestido, con un ojo formando el escote, y una boca bordada en la falda, y lo ha coronado con un tocado fusionando varios sombreros.
Otros looks que también despuntaron en la alfombra roja son:
El colorido diseño que Versace escogió para la cantante y actriz Dua Lipa, no dejó a nadie indiferente. Con volúmenes, un impresionante escote y una doble piel en sus largas piernas hizo su declaración de intenciones. El toque perfecto quedó patente con su voluminoso peinado decorado por unas flores en relieve en los tonos del vestido.
Con un look multicolor de Dior, Cara Delevingne marcó un antes y un después en la alfombra roja. Pero el protagonista indiscutible de su outfit fue sin duda su tocado polícromo con multitud de elementos dispares entre sí.
Lupita Nyong'o llamó la atención de todos los presentes con un vestido de estrellas engarzadas en forma de malla y rosado de Versace, coronado por unas hombreras y un abanico irisados en los colores del arcoíris, y un peinado decorado con pinzas doradas. Un total look que no dejó indiferente a nadie.
Un look de inspiración sesentera firmado por Miu Miu fue la elección de Elle Faning. Pero no fue lo más característico de su outfit. Su estrambótica y original manicura fue el plato fuerte de su elección.
También despuntó en la pasarela Darren Criss, que diferenció su traje con un llamativo Blazer obra de Balmain. El maquillaje aportó ese toque audaz y moderno que le faltaba.
El imponente vestido burdeos de la rapera Cardi B llegó como si de un tsunami se tratara. Único en sí mismo, no necesita adjetivos que describan un diseño tan vanguardista como el que Thom Browne ha creado.
Ezra Miller nunca defrauda, y esta vez vestido de Burberry, y con su característico maquillaje (que no te aconsejo que lo mires más de unos segundos) asombró a todos los presentes.
Zendaya, apodada como “Cenicienta Moderna”, tras su aparición en la MET gala con un refulgente diseño de Tommy Hilfiguer. Hizo su aparición con un vestido aparentemente normal, pero tras una escenificación de la Cenicienta, iluminó la alfombra roja con un vestido de cuento de hadas que fue adquiriendo luz propia y volumen poco a poco.
Y, para finalizar ¿Qué decir del look de Priyanka Chopra Jonas? Un exquisito diseño de Dior en tono plateado y decorado con plumas en contrastes amarillos y burdeos acompañado por joyas de Chopard.
Simplemente nos ha quitado el aliento.
El cabello rizado, la corona y el maquillaje han sido el culmen perfecto para una chica que nos tiene acostumbrados a peinados sencillos pero muy trabajados.
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